—Aquí solo escribe usted, Azkona
—Puede ser, mi sargento.
—¿Puede ser?
—¡Aquí solo escribo yo, mi sargento!
—Igual es que sus amigos se guardan los posts y al final no son ustedes los buenos, Azkona.
—No, no, los buenos sí que somos, señor.
—Pues aquí solo escribe usted, Azkona.